Hacer lo que NO te gusta puede aportarte grandes beneficios
En mi vida he logrado muchos objetivos asombros como estos:
- He creado y dirigido varios negocios de millones de Euros en distintos sectores
- He trabajado con muchos clientes billonarios y multimillonarios
- Me he jubilado joven a los 38 años
- He sido un inversor en bolsa rentable desde hace 21 años.
En retrospectiva me queda muy claro que hubiera sido imposible hacer todo esto sin estar dispuesto a hacer cosas que no me gustaban.
De hecho, creo que la principal razón por la que mucha gente no logra NUNCA lo que se propone, es por que es incapaz de hacer lo que no le gusta durante largos períodos de tiempo.
En este articulo te descubriré la importancia de hacer lo que no te gusta, y los tremendos beneficios que puedes lograr si lo haces bien.
Cómo aprendí la importancia de hacer lo que no te gusta
Yo estudié Ingeniería Industrial.
Es una carrera dura y técnica que requirió de 7 años de esfuerzo de mi vida.
La carrera no me gustó nada.
De hecho tras el primer año de cursarla, pensé en abandonarla, para hacer algo que me gustará más.
Por suerte, y gracias a mis padres, decidí continuar y acabarla.
Gracias a ello adquirí algunas habilidades vitales que han sido clave a lo largo de toda mi vida.
Una de ellas es la de aprender algo complejo y difícil en poco tiempo (accelerated learning).
Año tras año de carrera, me enfrentaba a disciplinas que no conocía para nada, en las cuales debía convertirme en un experto (pasar un examen exigente con nota), en menos de 4 meses.
Mecánica, Fluidos, Álgebra o Cálculo infinitesimal, son algunas de las joyas de la corona que todo estudiante de Ingeniería en Barcelona, estoy seguro que recuerda “con cariño”.
Con el tiempo adquirí esta habilidad de enfocar problemas complejos para poderlos resolver en poco tiempo.
Esto me fue muy útil cuando empecé a trabajar con multimillonarios que , ¡oh sorpresa!, también me ponían problemas realmente complejos que debía solucionar en plazos no muy largos.
Fue años después de realizar toda una serie de trabajos que no me gustaban en Ingeniería, cuando por fin entendí la utilidad (y la rentabilidad) de mi esfuerzo y sacrificio.
En retrospectiva, ahora podía entender para que me había servido el hacer lo que NO me gustaba.
Cómo hacer lo que no te gusta
Para ser capaz de hacer lo que no te gusta creo que hay unos cuantos puntos clave que te pueden ayudar a lograrlo:
1- Que alguien te cuente la rentabilidad de hacer lo que no te gusta
Es siempre muy útil que alguien exitoso te cuente su historia de éxito.
Eso es lo que trato de hacer aquí. Cómo mencionaba al principio, ninguno de los logros que te he subrayado, hubiera sido posible sin hacer cosas que no me gustan.
Si quieres el premio, hay que pagar el precio. No hay otra manera, y eso puedes aprenderlo por las buenas o por las malas.
Te recomiendo que sigas mi consejo y lo aprendas por las buenas.
2- Entender la temporalidad de lo que no te gusta hacer
Otro punto clave para mi, fue entender que lo que NO te gusta hacer varía en el tiempo, o que en otras palabras, no suele durar para siempre.
Volviendo al ejemplo anterior, los peores años en Ingeniería fueron los primeros.
A base de esfuerzo, sacrificio y constancia, al final lo que no me gustaba hacer ser volvió fácil y asequible (curva de aprendizaje), así que de esta manera, los últimos años de carrera fueron “un paseo por el parque”.
Es importante entender que lo que no te gusta hacer ahora, no tiene porque ser lo que no te guste hacer en unos años.
Lo que no te gusta, por no saber hacerlo, por ser incómodo o difícil, se puede transformar en algo agradable, e incluso divertido y apasionante con el paso del tiempo y la práctica.
3- Entender los tremendos beneficios de hacer lo que no te gusta
Finalmente, a mi siempre me ha servido mucho el entender los beneficios que te puede reportar a futuro el hacer algo que no te gusta .
Cuando empecé mi carrera cómo inversor en bolsa, el primer libro que leí fue “Security Analysis” de Benjamin Graham.
Era un “tocho” en inglés de 1.000 páginas escrito en un lenguaje críptico y complejo.
Me llevo varios meses leerlo, y más tiempo entenderlo en profundidad.
Pero lo hice con empeño, porque en seguida capté la potencia del interés compuesto, y los grandes beneficios económicos que los mejores inversores en bolsa podían lograr.
Cientos de libros de inversión después, ahora puedo decir que es un placer, re-visitar dicho libro .
Especialmente cuando lo hago tumbado en una hamaca después de haber surfeado en algún lugar paradisíaco.
El haber hecho lo que no me gustaba en aquel entonces, es lo que me ha permitido llevar ahora la vida que me gusta y adoro.
Diferenciar los 2 tipos de lo que no te gusta hacer.
Para terminar, te remarcaré que es crucial saber diferenciar entre:
- lo que no te gusta hacer y es útil y rentable y
- lo que no te gusta hacer y es perjudicial para ti
Hasta ahora, te he contado exclusivamente ejemplos del primer escenario en el que hice cosas que no me gustaban, pero que han resultado tremendamente beneficiosas para mi.
Pero el otro lado de la ecuación de mi éxito, es haber sabido NO hacer, aquellas cosas que no me gustaban hacer y que no tenían beneficios potenciales significativos, o que eran altamente perjudiciales.
Por ejemplo, el trabajar con gente que es incompetente (malos jefes, compañeros tóxicos, etc…) no aporta ningún beneficio significativo.
El perder tiempo leyendo y contestando e-mails inútiles, o seguir a falsos gurús del dinero, son cosas que no me gustan hacer, que también entran en este grupo.
Para tener éxito y ser feliz, hay que hacer cosas que no te gustan.
Pero eso no significa que debas hacer cualquier cosa que no te gusta.
Hay que saber diferenciar entre las cosas que no te gustan y que te aportan beneficios a largo plazo, y las cosas que no te gustan y que debes evitar hacer.
Al principio es más difícil diferenciar entre ellas, pero con la práctica y buenos maestros, se vuelve más fácil hacerlo.
EJERCICIO: Ahora es tu turno
Si te ha gustado mi artículo por favor compártelo.
También puedes contarme aquí abajo en los comentarios, tus experiencias al haber hecho algo que no te ha gustado al principio, y que resultó ser tremendamente beneficioso para ti a posteriori.
Muchas gracias.
BONUS TRACK: Manteniendo la disciplina de hacer lo que NO me gusta ahora que soy rico
Una de las ventajas de ser rico, es que muy a menudo no tienes la necesidad de hacer lo que no te gusta. Puedes hacer casi exclusivamente solo lo que te apetece.
Pero eso es algo peligroso, porque la capacidad de hacer lo que no te gusta es cómo un músculo, y si no se entrena se pierde.
Es por ello que aún hoy en día sigo haciendo de manera periódica cosas que no me gustan, cómo por ejemplo lavar los platos.
Lavar platos nunca me ha gustado. Después de años de hacerlo sigue sin gustarme.
Por si fuera poco, en la actualidad y desde hace ya muchos años, no tengo la necesidad de hacerlo. En casa tenemos servicio y lavaplatos, así que podría pasarme la vida entera sin lavar un plato más.
Pero lo hago porque mantiene la disciplina de hacer algo que no me gusta intacta.
Así cuando me enfrentó a nuevos retos y tengo que hacer cosas que no me gustan, mi musculo sigue en plena forma.
En mi agenda, siempre hay marcadas hacer, cosas que no me gustan. Y te recomiendo que en la tuya también. El volverse un perezoso acomodado es muy peligroso en los tiempos que corren.
Veo a mucha gente quedar obsoleta muy rápidamente sin ni darse cuenta. Pero eso ya es material para otro articulo.
¡Hola Jose!
Casualmente leo tu artículo cuando un amigo está tratando de trabajar en una nueva pasión que acaba de descubrir. Con unos 32 años y ganándose bastante bien la vida como informático, ha dejado su trabajo para organizar viajes asociados a actividades acuáticas.
La leche va a ser importante y de momento no le he dicho nada porque sería como hablar contra la pared.
Supongo que los influencers han hecho pensar a la gente que hay que trabajar en sus pasiones, con lo peligroso que es eso… además que los hobbies se hacen cuando a uno le apetece, si cada día tuvieras que levantarte por narices a las 6am para enseñar surf cada día de tu vida, creo que pronto tu mayor afición se convertiría en un dolor de cabeza (y no sé si aprenderían mucho surf contigo ;p)
Por otro lado, recuerdo muchas cosas que hacía y no me gustaban:
– Madrugar para pegarme una hora en el bus para ir a la universidad -y otra hora de vuelta-
– Trabajar los fines de semana mientras mis amigos jugaban a la play
– Trabajar 12h en el bar mientras mis amigos me pedían cubatas
– Levantarme a las 6:30h para mi primer trabajo post universidad, saliendo de la oficina a las 21h
– Clases de inglés mientras mis amig@s se iban de cervezas
– Fines de semana analizando para aplicar la mejor estrategia
Pero todo lo hacía porque sabía que era lo mejor para mi futuro, como así ha sido.
¡Muchas gracias por seguir compartiendo!
¡Pura Vida!
Dani
La importancia de hacer lo que NO TE GUSTA
¡Muchas gracias Dani por tu excelente comentario y por los magníficos ejemplos que compartes de tu vida personal!.
En muchos de ellos me veo reflejado y me pregunto si en otra vida tu y to fuimos hermanos o familiares cercanos 😉
Este ha sido uno de los grandes descubrimientos que he hecho en mi vida, y que ayuda a separar los que lo intentan de los que lo consiguen: hay que estar dispuesto, a hacer cosas que (al menos al principio) no gustan.
Cualquiera puede hacer lo que le gusta (aunque ello no implique que se haga de oro haciéndolo).
Solo los pocos que apechugan y hacen todo lo necesario (lo que gusta, lo que no gusta, y todo aquello intermedio), son los que a la postre recogen los frutos del esfuerzo.
¡Un fuerte abrazo y Pura Vida!