El Hombre Más Rico de Babilonia ha vendido millones de copias. Descubre todas sus mentiras ocultas.
Si estás interesado en la historia de George S. Clason y su libro “El Hombre más Rico de Babilonia”, has llegado al lugar adecuado.
En mi artículo descubrirás cómo Clason:
- Vendió falsos conocimientos para hacerse rico
- Llevó a la quiebra su empresa
- Acuñó términos tan peligrosos cómo “El pagarse a uno mismo primero” que todavía perduran hasta nuestros días.
La historia de George S. Clason, es posiblemente el nacimiento del precursor de todos los Falsos Gurús del Dinero, Las Finanzas Personales y las inversiones de hoy en día.
¿Estás preparado para descubrir todas sus peligrosas trampas y mentiras?
George S. Clason: Orígenes
George Samuel Clason nació en Luisiana, Misuri el 7 de noviembre de 1874.
Estudió en la Universidad de Nebraska y posteriormente sirvió en el Ejército de Estados Unidos durante la guerra hispano-estadounidense.
Después de la Guerra, se mudó a Denver Colorado, donde empezaría su carrera profesional,
Entrando en el Mundo de los Negocios
En 1905, fundó su empresa Clason Map Company, que se especializó originariamente en la producción de Mapas para la Minería aprovechando la floreciente Industria Minera de Colorado y Nevada.
Rápidamente, el negocio se movería hacia los segmentos de mapas de ferrocarriles y mapas de ciudades, llegando en 1920, a orientarse al sector con el que tuvo más éxito y por el cual sería más recordado: los mapas de carreteras.
El negocio de mapas le llevó a abrir otra oficina en Chicago (Illinois) y una oficina satélite en Los Ángeles (California).
Bajo los efectos de la Burbuja de los años 20
Para entender bien la historia de Clason, hay que tener en cuenta la época en la que se desarrollaba todo esto.
Ni más ni menos que la década de los años 20, dónde el crédito fácil y el furor especulativo en los mercados financieros con muchas operaciones a margen, llevaron a Estados Unidos a una de sus décadas de mayor crecimiento económico.
Es por ello, que Clason empezó a escribir a mediados de la década unos panfletos sobre como hacerse rico rápidamente (Get-Rich-Quick en inglés).
Estos panfletos contaban historias inventadas (parábolas) que sucedían en la Antigua Babilonia, y que tuvieron buena acogida entre las entidades bancarias y de seguros, que los distribuyeron regularmente.
Serían estos mismos operadores que pretendían querer enseñar a la gente cómo hacerse rica, los responsables de la catástrofe que vendría pocos años después.
Con todo este frenesí especulador en pleno auge, Clason decidió crear un negocio paralelo de publicación de libros de educación financiera.
Así es cómo llega finalmente en 1926, a publicar su ópera prima y libro más conocido “El Hombre más rico de Babilonia”, que recogía en un solo volumen sus panfletos y parábolas más populares.
La Dura Realidad: el crack del 29 y la quiebra del negocio
Cómo sigue pasando hoy en día, Clason fue víctima de un error que cometen muchos falsos gurús del dinero, y es creerse mejor en los negocios y las inversiones de lo que realmente uno es.
Clason, aprendería de primera mano lo que uno de los inversores más legendarios de todos los tiempos enseñaría después.
“Solo cuando la marea baja, es cuando se sabe quien se estaba bañando desnudo” – Warren Buffett
Cuando estalló el crack bursátil de 1929 y se produjo la gran depresión el negocio de mapas de Clason se fue al garete, cerrando sus puertas definitivamente en 1931 por quiebra.
Aquel que envalentonado por la burbuja se había dedicado a enseñar a los demás cómo hacerse rico rápidamente, había quebrado el negocio donde había invertido toda su carrera profesional durante 26 años.
Clason tenía 57 años y después de una vida de trabajo, nada de que presumir.
Esto demuestra una cruda realidad sobre los falsos gurús del dinero, los negocios y las inversiones, y es que tras sus libros más populares se ocultan una incapacidad personal de ganar dinero en los negocios de verdad, más allá de vender a sus seguidores falsas teorías económicas.
Con esta situación en frente, Clason se dedicó a publicar más libros sobre dinero, convirtiéndose este negocio, en su única fuente de ingresos y de riqueza.
Dicho de otra manera, Clason nunca se hizo rico por cuenta propia, sino vendiendo a los demás teoría falsa sobre cómo hacerse rico.
Pagarse a uno mismo Primero: Desmontando el mito
Una de las lecciones más famosas (y erróneas) que Clason dio a sus adeptos, fue la de pagarse a uno primero (Pay Yourself First), cómo método para hacerse rico.
No hace falta ser un genio para descubrir que esto es una soberana tontería.
De hecho los más ricos, hacen exactamente todo lo opuesto. Son los últimos en cobrar.
Solo hace falta leer las memorias de Phil Knight (Cofundador de NIKE) dónde explica con lujo de detalles, cómo lo más importante durante los 10 primeros años de vida de su ahora legendario negocio, era pagar a todos y cada uno de sus acreedores sin falta.
También Phil explica cómo eso implicaba muchas veces que él no tenía nada para cobrar (ni su propio sueldo), y cómo esto le obligaba a pasar estrecheces económicas.
Ahora Knight tiene un patrimonio de 47.000 Millones de dólares, y NIKE ha superado con éxito incontables crisis, siendo ahora más fuerte que nunca.
Otro ejemplo icónico de pagarse el último, es el de Jeff Bezos, fundador y máximo accionista de Amazon.
Bezos destina a invertir cada año decenas de miles de millones de dólares en mejorar su compañía (I+D).
En sus legendarias cartas anuales y durante más de 20 años, explica que prefiere sacrificar sus benéficos a corto plazo (pagarse a sí mismo primero), con tal de obtener un mayor benéfico a largo plazo y hacer a su empresa más resiliente.
Bezos ha llegado a ser el hombre más rico del Mundo con más de 177 Billones de Dólares de Patrimonio neto.
Pero esta es la ironía del éxito de los Falsos Gurús del Dinero: la gente sigue prefiriendo leer y estudiar historias inventadas de gente que son unos fracasados, pero que se venden muy bien, en lugar de aprender de los inversores y hombres de negocios más reputados y consolidados de la historia.
¡Ahora es tu turno!: EJERCICIOS
Yo soy José Castelló, y a diferencia de toda esta farándula de falsos gurús del dinero, yo hice mi fortuna y aprendí de negocios e inversiones con algunos de los mejores empresarios, hombres de negocios e inversores del mundo (aquí puedes leer mi historia completa).
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El primer Programa (¡Fuck Money Gurus!) es un training de 21 días destinado a que nunca caigas en manos de estos gurus sin escrúpulos y seas estafado.
En segundo lugar, te pido que distribuyas este artículo al mayor número de personas posible.
Yo no puedo competir con la maquinaria publicitaria de George S. Clason, pero si cada uno hace el máximo esfuerzo por difundir este mensaje, podemos evitar al menos que otras personas caigan en sus garras y paguen las desastrosas consecuencias.
¡Gracias por adelantado por tu ayuda en este tema!.
Y finalmente, si te ha gustado mi artículo o simplemente quieres comentar tus malas experiencias con este tipo, deja aquí abajo tu comentario.
BONUS: El horrendo legado de George S. Clason
Desgraciadamente, la popular frase “muerto el perro, muerta la rabia”, no aplica cuando se trata de los falsos gurús del dinero.
La razón por la que es así, se debe a que sus erróneas y peligrosas ideas, perduran en el tiempo a través de sus libros y los nuevos imitadores que reciclan sus ideas, encontrando a nuevas generaciones de incautos que muerden el anzuelo.
George S. Clason fue uno de los pioneros en lo que se refiere a muchos de los conceptos que más utilizan hoy en día los falsos gurús del dinero para seguir estafando a sus víctimas.
De hecho los bancos y entidades financieras siguen recomendando sus escritos. Los mismos bancos que en la gran crisis financiera global de las subprime casi se cargan el sistema financiero mundial.
Pero muchas veces, lo peor es hay nuevos gurús que reciclan términos tan peligrosos cómo el pagarse a uno primero, acuñando nuevos términos igual de peligrosos cómo “El preahorro”.
Al final son los mismos perros con distintos collares.
Lo peligroso de la situación, es que alguien que no ha leído nunca “el Hombre más rico de Babilonia”, ni ha oído jamás hablar de George Clason, puede estar consumiendo y aplicando sus erróneas teorías gracias a la magia de internet, y el remarketing de los nuevos falsos gurús del dinero.
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FUENTES:
George S. Clason (Wikipedia, Inglés)
George S. Clason Business Story (Geographicus)
Clason Maps Company Bankruptcy (Geroge Glazer Gallery)
The Richest Man In Babylon: el Road Map de los Gurús financieros actuales (Success)
Muchas gracias José. No lo conocía.
Un abrazo!
George S. Clason: El engaño del Hombre Más Rico de Babilonia
¡De nada Marcos!
Ahora ya estás sobre aviso 🙂
¡Pura Vida!
Hola Jose!
Qué bueno empezar el mes con nuevos conocimientos tuyos 😊
Hace muchos años leí este libro y estoy seguro que no me queda conocimiento erróneo por la limpia que hice con los tuyos 😉
Ayer hablaba con un conocido en el gimnasio que está emocionado con su nueva aventura: ser trader para la “libertad financiera”… y uno de los argumentos por los que defendía a su falso gurú es que “había patentado en Estados Unidos muchas técnicas” y que “Los exitosos una vez tienen dinero quieren influir en los demás…” así que es el mismo Marketing que ya utilizó George S. Clason.
Por mi parte no aprendo porque intenté argumentarle para ayudarle.
Me contó que una técnica patentada del falso gurú es “No invertir más del 10% de tu patrimonio en una misma inversión”. A parte de no entrar por qué es errónea en cuanto a limitar, le pregunté que si tenía unos ahorros de 10.000€ (no le dije Patrimonio), si podría invertir el 10%, 1.000€ en 10 posiciones, a lo que me respondió:
“Sí, claro. Espera, ¿10% de 10.000 son 1.000€?… ¿Estás seguro?”
Aquí me di cuenta de que no podría ayudarle y que me cerraban el SPA.
En cuanto a Bankinter, es increíble cómo ponen en una misma lista el Inversor Inteligente y a 4 falsos gurús, genius!
Por cierto, siempre que veía a una persona pedir en la puerta de un supermercado, pensaba que lo interesante sería enseñarle a pescar, pero no todos pueden o quieren. Recientemente he visto a una persona que me da mucha pena y he decidido ir a hablar con él: si veo esperanzas, tendré tu libro preparado para regalárselo. Y quizás sea algo que implemente más 🙂
Muchas gracias por todo, Pura Vida!
Dani
George S. Clason: El engaño del Hombre Más Rico de Babilonia
¡Muchas gracias Dani por tu comentario y por tu excelente aportación personal!
Me sorprende ver que aún continuas intentando ayudar a gente que es literalmente imposible ayudar.
Yo ya hace muchos años que dejé de hacerlo.
Imagina que quisieras entrenar a personas corrientes para que llegaran a ser grandes estrellas de la NBA.
Por supuesto que puedes decidir entrenar al primero que pase por la calle, pero si quieres tener éxito en tu propósito, es mejor entrenar a candidatos que sean altos, jóvenes, y en buena forma física.
Pierdes el tiempo si quieres entrenar a ancianos bajitos y con problemas de salud para que lleguen a ser el próximo Michael Jordan.
Las buenas intenciones son eso, buenas intenciones, y son muy loables y dicen mucho y bueno de ti, pero de nada sirven si nunca obtienen los resultados buscados.
Después de intentar ayudar a 1.000 personas que nunca lo lograrán, quizás aprendas la lección de que tu tiempo es escaso, y de que es más inteligente y efectivo invertirlo en algún propósito que SI tenga alguna probabilidad de éxito.
¡Un fuerte abrazo y Pura Vida!
Hola Jose,
Menudo tema este mes! . Que falta hace una mínima cultura financiera!
Hace muchos años cayo en mis manos este libro, y por suerte o por criterio no me atrajo en absoluto. A las pocas páginas vi que era infumable, filosofía del autoengaño que yo llamo.
Entonces, no tenía los conocimientos o experiencias que tengo ahora y como digo rechace el libro y no me arrepiento en absoluto.
Pura vida!
George S. Clason: El engaño del Hombre Más Rico de Babilonia
¡Muchas gracias Ricard por compartir tu experiencia con todos los Alumni!
De hecho, este tipo de decisiones, que muchas veces pueden ser instintivas o casi automáticas, tienen mucha más importancia de la que les otorgamos.
La diferencia entre esquivar un precipicio por unos metros, o caer de lleno en él, es sustancial.
Y es a menudo este tipo de decisiones que parecen pequeñas, las que marcan una diferencia considerable a posteriori.
Me alegro mucho por ti!
¡Un abrazo y Pura Vida!