Aprender inglés es crucial para la vida y los negocios. Así lo hice yo, sin ir a clase.Sir Paul David Hewson, más popularmente conocido como Bono, es el líder y cantante de la banda de rock U2: uno de los grupos musicales más aclamados y populares del planeta, con millones de copias vendidas de sus discos.
Lo que nadie sabe es que Bono fue mi profesor particular de inglés. Bueno de hecho, este dudoso honor fue compartido con muchas otras estrellas del mundo de la música o del cine. Entre ellas, por citar algunas: Prince (Rogers Nelson), Mark Knopfler (Dire Stratis), Jon Bon Jovi, Harrison Ford, o Michael Douglas.
Habitualmente el mundo está estructurado de una manera en la que se suele pensar de forma unidireccional, es decir, para conseguir un objetivo, existe un método único y popular, para hacerlo.
No obstante lo que suele pasar es que existen una diversidad de caminos, que no tan solo te permiten llegar al mismo objetivo, sino hacerlo de una manera más rápida y eficiente. El único requisito para hacerlo, es estar dispuesto a salir de lo convencional y aventurarte en lo inexplorado. Para aquellos que están dispuestos a explorar esta vía, aquí os describo como he aprendido inglés (y otros idiomas).
Si además eres intuitivo, descubrirás en mi artículo un sistema de aprendizaje que va más allá de los idiomas y que puede ser utilizado en muchos otros campos.
Lo primero, primero: la motivación adecuada para aprender inglés
“Hello, what´s your name?” – El mar brillaba transparente, ella estaba en bikini, y tenía el pelo rubio como el oro. Si no recuerdo mal era de Suecia. Teníamos apenas 13 años. Era la primera vez que alguien se dirigía a mí en inglés en el mundo exterior. Entonces comprendí que había gente que hablaba de esa manera.
Hasta el momento, como muchos otros niños de mi edad, tenía clase inglés en el colegio. Sin embargo, no entendía su razón de ser: ¿Por qué llamar Apple a una manzana (si se ve tan claro que es una Manzana!)?. Más bien pensaba que se trataba de un juego de equivalencias, en lugar de un medio de comunicación, por lo que no le encontraba el sentido, ni ponía mucho interés en ello.
No obstante, al darme cuenta de que había gente que hablaba en ese juego de palabras, y que gracias a él, podía hacer nuevas amistades durante las vacaciones de verano, cambié totalmente mi predisposición hacia la materia. Ahora el juego tenía un sentido, un objetivo que me interesaba, y que era tangible, más allá de los aburridos libros de texto de la asignatura.
Cuando a menudo veo gente que fracasa al aprender idiomas nuevos, creo que se debe en gran parte, a que el objetivo y beneficio final no está claro o no es lo suficientemente motivador. Lo hacen porque todos lo hacen, o porque les obligan en el trabajo, o porque está de moda. Al final todos sucumben, por la falta de motivación y posterior disciplina, necesarias para llegar a la conclusión del proceso.
En cambio, si ves que el aprender inglés te va a generar más dinero, poder vivir en un sitio que te guste más, relacionarte con gente más diversa o interesante, proponerte para un empleo deseado, o amar a otra persona, entonces la grandeza del objetivo y la visión de su consecución salvará todas las barreras del camino. De lo contrario, tendrás que utilizar la clásica excusa: “Es que yo no soy muy bueno para aprender idiomas”.
Estrellas de rock y cine: el método inverso
Una vez la motivación estaba servida, y el objetivo fijado, entonces faltaba encontrar un método rápido para conseguirlo, y poner más interés en clase, seguía pareciendo de todo, menos excitante.
Me gustaría poder presumir de que diseñé a medida un método para conseguirlo, pero la verdad es que no fue así: el método me encontró a mí.
Por aquel entonces, U2 publicó “The Joshua Tree” y quedé inmediatamente traspuesto con su balada “With or Without You”. Quería poder cantar la bella canción y comprender su significado.
Como buen miembro de la generación pre-internet, tuve que comprar el álbum (no existía Spotify), y adquirir el libro de letras del grupo, con las traducciones en castellano (tampoco existían las letras traducidas online).
Escuchando y repitiendo la canción, no solo obtuve rápidamente la pronunciación adecuada, sino que descubrí un método de memorización rápida de palabras con música.
Habitualmente la gente busca las palabras al revés. Es decir, quiere decir Manzana en inglés, y entonces va y busca la traducción, encontrando Apple. Este sistema, que es el lógico, tiene una pequeña desventaja: que el cerebro no funciona muy bien con él. La prueba es que a menudo al cabo del tiempo, acabas olvidando la palabra estudiada, y vuelves al clásico: ¿Cómo se decía Manzana en inglés?.
Sin embargo, el cerebro tiene una retentiva increíblemente mejor al revés. Es decir, si ves casualmente la palabra Apple, y preguntas lo que significa, dicho significado queda mucho más pegado a tu memoria.
Obviamente al aprender todo de palabras casuales que no buscaba, en las letras de las canciones, empecé a formar sin darme cuenta, una vasta colección vocabulario, que sin saberlo me sería de gran utilidad. Así ya a una temprana edad, conocía el significado de palabras como “Hide, Crawl, Mess, Storm, Belong, etc…” que muy pocos de mis compañeros conocían.
De la misma manera, y por aquella época, empezaron a salir los televisores con opción de sonido dual, de forma que podía ver al famoso arqueólogo Indiana Jones (Harrison Ford) en casa, enseñándome inglés, gracias a una película que sabía al completo en castellano. Una vez más, las palabras venían a mí en el idioma original, y el cerebro y la historia de la película obraban de nuevo el truco inverso.
Se dice que con 1.000 palabras aprendidas en un nuevo idioma, uno ya se puede defender. La verdad nunca las he contado, pero sí te puedo asegurar, que cuando tu base de diccionario es amplia, el truco está casi completo.
Sorpresas de hackear el sistema
Cuando intentas hacer cosas, de manera distinta, no siempre es algo bienvenido por el sistema. ¿Qué pasaría si la gente descubriera que puede aprender idiomas sin ir a clase? ¿Se iba a quedar mi profesor del colegio sin trabajo?.
Pues algo curioso sucedió en clase. Yo seguía sin interés por los métodos tradicionales, y continuaba dibujando en la clase de inglés. De tanto en tanto, en la rueda de preguntas habitual, el profesor me inquiría: “¿Cuál es el Past Tense de To Run?”, o bien “Pon esta frase en Present Continuous”. Obviamente no tenía ni idea de que me estaba hablando, con lo que era incapaz de entender la pregunta, y menos de responderla.
No obstante, cuando llegaba el examen, siempre sacaba excelente. La razón era muy simple. Los exámenes siempre mostraban un ejercicio de muestra, o contenían una opción de Fill In the Blanks (rellenado de palabras), o bien escoger una opción entre múltiples respuestas.
De esta manera siempre entendía lo que me pedían, gracias al ejemplo, y siempre era fácil encontrar la respuesta correcta al Multiple Choice o al Fill In the blanks: siempre lo hacía de oído. Ponía lo que mejor me sonaba.
Al profesor no le parecía muy lógico que un alumno que no sabía nada de teoría gramática, sacara 10´s en los exámenes, así que optó por la opción más clásica de pensamiento: “Sr. Castelló, Ud. copia en el examen!”.
Ya sabía yo que ser discípulo de Indiana Jones, me acarrearía algunas aventuras, pero no imaginé este resultado.
Felizmente el problema se resolvió fácilmente. El astuto profesor, me colocaba solo, sentado en su mesa, al frente de toda la clase. Totalmente aislado de mis compañeros, y totalmente registrado de la ausencia de chuletas (apuntes ilegales), con lo que era imposible que pudiera copiar nada de nadie.
No obstante los siguientes exámenes, continuaron produciendo 10´s. Finalmente, el profesor se rindió a la evidencia de que no había trampa ni cartón. Sabía hablar y escribir en inglés, sin tener idea de gramática, y sin el más mínimo interés por su clase.
Me permitió volver a sentarme con mis compañeros durante los exámenes, algunos de los cuales, aprovecharon para copiar (es el precio de la fama…), y resignado me preguntó: ¿Cómo lo haces?. Le contesté: “Simplemente, sé las respuestas.”
Para mi esa fue una lección importante, en el sentido de comprender que:
1- El sistema no quiere métodos alternativos a los comúnmente aceptados, aunque estos sean más efectivos. El pensar diferente es peligroso (para el sistema, claro…).
2- El sistema está dispuesto a castigar o a reprimir dichos métodos, por tanto, has de estar dispuesto a luchar por lo que crees más conveniente.
3- A menudo hay un método más eficiente para conseguir el mismo resultado. Los que dedican tiempo a encontrarlo, suelen también, gozar de la recompensa.
Aprovecha tu alrededor : “Oui, Madame”
Durante mi primera etapa laboral, tuve la suerte de trabajar bajo el mando de una eficiente jefa francesa. Como nuestra actividad laboral era de carácter internacional, a menudo la oía hablar en francés por teléfono desde la mesa de al lado.
Pensé que teniendo a una jefa francesa, sería bueno aprovechar la ocasión para aprender el idioma. Así que a menudo, aprovechaba la ocasión para comentar con ella temas en francés.
Mi francés, lejos de ser idílico, continúa siendo a día de hoy suficientemente útil, como para hacerme entender en todo lo que preciso.
A veces solo hay que darse cuenta de quién tenemos al lado para aprovechar sus conocimientos y aprender algo útil y nuevo. Es interesante, gratis, y cuesta poco esfuerzo, y a menudo las recompensas son geniales.
Inmersión total: perdido en Bad Neustadt, o cómo esquivar todas las lecciones
Más tarde también descubrí, el que para mí es el mejor método para aprender un idioma: la Inmersión Total.
Bad Neustadt es un pequeño y encantador pueblo en Alemania (población: 15.000 habitantes) en el que debía pasar una temporada con motivo de un training laboral que debía recibir. La empresa situada en una localidad cercana, contaba con trabajadores muy cualificados que hablaban un perfecto inglés, hecho que facilitaba mi trabajo durante el día. Pero una vez terminada la jornada laboral debía regresar a Bad Neustadt, donde para mi sorpresa, nadie parecía entender una pizca de inglés.
Por lo tanto me hallaba en una localidad germano parlante al 100% , mientras que yo tenía un 0% de conocimiento de alemán.
No obstante, esto me sirvió para descubrir que este es el método más rápido para aprender un idioma. Frecuentemente, las personas en este tipo de viajes, tienen un compañero, conocido, amigo, etc… que habla su idioma natal, de forma que alternan su aprendizaje del nuevo idioma con el uso del idioma ya conocido. Esto resulta ser a fin de cuentas una distracción de tiempo y esfuerzo con respecto al objetivo. Cuando te encuentras en una situación límite, donde todos hablan alemán, todo está escrito en alemán, y nadie habla inglés… no queda otra que aprender alemán…y rápido.
No me gusta el café. Nunca lo tomo. Así que después de recibir café los tres primeros desayunos de mi estancia (y dejarlos intactos), al cuarto ya había aprendido a decir “Eine heiβe Schokolade, Bitte!” (un chocolate caliente, por favor!).
A menudo la gente suele seguir la línea de razonamiento clásica, de que para aprender idiomas hay que ir a clase y estudiar, para poder hablarlos.
Gracias a la Inmersión Total, descubrí que el método más corto y rápido (y quizás el más aventurero también) es el opuesto, pasar directamente a la práctica saltándose toda la teoría.
Ahora, frente a la necesidad urgente de aprender idiomas, sé que soy capaz de alcanzar el nivel básico con unos meses de convivencia in situ. Esto no es algo que todo el mundo sabe, y mucho menos es algo que muchos estén dispuestos a intentar. Por eso una vez más, me gusta saber que cuento con una ventaja competitiva respecto a la gran mayoría de personas.
Finalmente, al cabo de unas semanas en Bad Neustadt, acabé conociendo a una simpática camarera que hablaba inglés (creo que era la única persona en la localidad que lo hacía), y acabé aprendiendo cosas como “Heute Abend wir lassen die Sauen raus”, (que quedará en versión original para mis lectores germanos), y que no creo que nunca hubiera aprendido en clase.
El viajero simpático: ventajas de hablar mal un idioma
Muchas veces he oído la clásica excusa: “No me atrevo a hablar el idioma, porque lo hablo mal”.
Es un razonamiento circular, que acaba por eliminar cualquier tipo de posibilidad de que acabes hablando correctamente un idioma. Cómo no lo hablas bien, no lo practicas, y como no lo practicas, cada vez lo hablas peor (y nunca lo hablarás bien).
Métete esto en la cabeza: quien no es capaz de hablar un idioma mal, no es capaz de hablarlo bien. La práctica y posterior corrección progresiva lo son todo.
Sin embargo, con los años, descubrí un hecho curioso. Durante mis múltiples viajes ponía siempre en práctica las enseñanzas que aquí describo. Desde dar las gracias en Tailandés, a decir palabras amables en Árabe. En todos los destinos, me di cuenta de las simpatías que despertaba un extranjero, intentando balbucear algunas palabras de forma incorrecta en el idioma local. La gente me dispensaba un trato más amable y afable que al resto de turistas con los que interaccionaban.
Con la práctica, fui avanzando en ciertos idiomas, de manera que la línea entre el aspirante a aprendiz y el nativo iba difuminándose cada vez más. A la vez que sucedía esto, sorprendentemente también se difuminaba el trato especial que recibía por parte de los locales, al asumir que por una razón u otra, yo era ya uno de ellos. En resumen, que como extranjero con buenas intenciones de integrarme recibía mejores atenciones, que como local experto en una lengua.
No es de extrañar, que aún de vez en cuando, hable menos bien un idioma de lo que realmente soy capaz de hacerlo, ya que ello despierta más simpatías y desenlaza mejores situaciones, de las que sería capaz de generar de la actuación contraria. Sorprendentemente, a veces, hacerlo mal, tiene su recompensa.
Así que la próxima vez que pienses que no dominas suficientemente un idioma para hablarlo, recuerda romper este razonamiento circular, y prepárate para disfrutar las ventajas del viajero simpático.
Bonus tracks: mi primer disco, hackeando Pulp Ficiton, y Japonés en 10 minutos
Después de tanto hablar de aprender idiomas he pensado que sería ameno acabar este artículo con unos ejemplos prácticos.
El primero, es una canción que grabé en mi primer disco (esa es otra larga historia) con mi buen amigo Lluís M. al piano. Se trata de una cover de Sir Elton John de “Your Song”.
Y aunque es imposible acercarse al genio, espero disfrutes escuchando el intento, tanto como yo disfrute intentándolo. (Si la pones en alto y empieza a llover, declino cualquier responsabilidad por ello).
El segundo, corresponde a mis prácticas de interpretación dramática, emulando a Samuel L. Jackson en el papel de Jules Winnfield, durante la escena de Pulp Ficition, en la que sermonea a sus víctimas con un salmo inventado (Ezequiel 25:17).
Cuando logre imitar con éxito el acento de un gángster afro-americano de Inglewood, casi ya no quedarán metas imposibles.
Finalmente, un pequeño cambio de registro, para atacar uno de los idiomas más complicados que existen de aprender para un Gaijin (外人): el Japonés. Aquí te dejo este excelente vídeo, donde puedes ver los 1945 símbolos Kanji del idioma, acompañados por una excelente banda sonora.
Y aunque los japoneses tardan años en aprender y dominar su propio idioma, intenta ver cuantos símbolos puedes memorizar (y posteriormente dibujar) durante unos cuantos días sucesivos de intentos. Es mucho más fácil aprender su significado a posteriori, cuando ya has memorizado el símbolo en sí, sin ningún significado previo, que no hacerlo todo de golpe.
Cada experiencia, es una llave para la sabiduría. Aprovéchalas todas.
Me parece muy interesante tu experiencia de aprendizaje de idiomas , es más, la ratifico pues me ha ocurrido igual con la lengua portuguesa: consigo comunicarme en ese idioma sin haber nunca abierto un libro de gramática portuguesa.
Un Maestro me enseñó que la sensibilidad es nuestro radar psicológico que actúa mucho antes que la razón.Parece también que cuando conectamos cualquier experiencia a nuestra vida, queda grabada de forma más duradera en nuestra conciencia.
Gracias por tu blog, José!
Gracias a ti Octavi, por compartir tu bonita experiencia y por seguir el blog!
Realmente me ha encantado leerla.
¡Muito obrigado!
Qué casualidad, yo también he elegido a u2 para aprender..Me ha encantado y me ha confirmado mi intuición. Nunca dejo la interpretación… Gracias!!!
Genial Carmen!
Me alegro mucho!
Un fuerte abrazo y keep singing and learning! 🙂
Buenas noches (imagino que andas por alguna isla del sudeste asiático),
Hace 1mes te encontré por casualidad en internet y desde ese día he intentado analizar toda la información que has ido dejando por youtube, tu web y …finalmente, tu libro.
He de darte las gracias por la síntesis y lo ameno que es el libro.
Yo vivo fuera de España desde hace ya unos años, tuve que pedirle a un gran amigo que me comprase unos cuantos ejemplares para recogerlos en mi reciente visita y poder distribuir la palabra del mesías entre mis amigos. A mí me duró menos que un caramelo en la puerta del colegio. Entre el tren a casa de mis padres y el vuelo de vuelta…
La verdad es que hemos tenido vidas muy similares, aunque carreras profesionales diferentes. Aun así, coincidimos en muchas formas de actuar frente a la vida pero tú eres bastante más despierto y locuaz.
Estoy en la penúltima fase del libro y tengo muy visualizado el camino. Me falta aprender más de inversión de capital. Aunque tengo varios depósitos y demás, soy joven y querría entrar un poco más en renta variable. Si algo se tuerce un poco, que sea ahora que soy joven y que inviertiendo un par de años más podría resolver: si se tuerce para bien, que genere un colchón para el que va de camino.
No he encontrado ningún mail personal donde escribirte por eso lo dejo en el blog. Te adjunto un capítulo que añadiría por experiencia personal: factor G en el trabajo, tus conocimientos valen poco en países como España, EEUU o Alemania, pero valen su peso en oro en otros muchos países. Fórmate sólidamente, trasládate a un sitio de estas características, suelen ser países baratos, y tardarás la mitad en llegar a tu meta.
Nuevamente te agradezco las enseñanzas.
Buen viaje!
Miguel
Gracias Miguel por tus palabras y por tu cariño!
Siempre me alegra ver a gente que avanza decidida a por sus sueños y que además los comparte (regalando libros) con sus seres queridos!
Espero tu puedas realizar los tuyos muy pronto, y saber que he podido aportar un granito de arena en el proceso.
Te agradezco la sugerencia respecto al Factor G laboral, pero este y otros muchos capítulos, han sido omitidos a propósito en el libro.
El motivo es que el libro quiere ser una guía para todos aquellos que soñamos con una vida diferente, pero no quiere ser un manual “para dummies”.
Le doy al lector los elementos que me parecen claves para lograrlo, pero solo él, puede y debe atar los cabos por sí mismo.
Quiero estimular a pensadores, no acostumbrar lectores a que se lo den todo resuelto. Estoy seguro de que sabes a qué me refiero 🙂
Espero que sigas sintonizado a este canal, y que las enseñanzas y experiencias que iré publicando, continúen ayudándote en tu camino vital.
Mientras tanto, un fuerte abrazo desde el paraíso, y gracias de nuevo por ayudarme a difundir mi mensaje vital 🙂
Gracias, Gracias, Gracias Sencillamente Gracias por Existir
Definitivamente es la vibración lo que nos atrae o nos aleja
Un Abrazo fuerte Jose
Post: Aprender idiomas
Gracias a ti por leer, seguir y recomendar!
Un fuerte abrazo hacia México! Pura Vida!